11/09/2015

Rinomodelación: mejora tu nariz con una inyección

La rinomodelación es la técnica que nos permite suavizar las facciones de la nariz de manera rápida, segura y en consulta.

La nariz es una parte fundamental en la cara de una persona, y también de su personalidad. Nos aporta una diferenciación muy grande con respecto a las demás personas. Las orejas son más o menos de forma y tamaño iguales entre los seres humanos, pero dentro de las cosas que más nos pueden diferenciar está la nariz. Sin contar que al estar en el centro mismo de la cara es imposible ocultarla o disimular sus defectos.

Además, puede ser incluso un signo de pertenencia a un grupo étnico (asiático) o familiar (familias con nariz muy chata o con un dorso muy prominente), con lo que ello conlleva de manera cultural o social.

En cualquier caso, la rinoplastia o cirugía de la nariz es la solución a la corrección de cualquier cosa que no nos guste de la nariz. Pero no todo el mundo quiere una intervención, de entrada. Además en muchas ocasiones, los pacientes no saben muy bien cómo desean la nariz y no quieren arriesgar. Y para éste tipo de pacientes se ha creado la técnica de rinomodelación.

La rinomodelación consiste en el moldeado de la nariz mediante infiltración de Radiesse (hidroxiapatita cálcica) para disimular por ejemplo un dorso muy prominente. Inyectamos con aguja muy fina bajo la piel de la nariz y moldeamos el producto para disimular el dorso de tal forma que la paciente “deja” de tener esa giba tan prominente.

De ésta forma el paciente en 20 minutos “estrena” una nariz más acorde a sus deseos o a sus facciones sin necesidad de pasar por el quirófano. El inconveniente o la ventaja para algunos, puede ser que la duración del efecto ronda el año, por lo que una vez pasados estos meses, el paciente vuelve al estado original.