04/08/2016

¡Stop a los masajes tras un aumento de pecho.!

Di no a los masajes tras un aumento de pecho. Y dilo bien alto. Y hazlo porque va en contra de tu beneficio y sólo a favor del beneficio del que te los vende.

Los masajes tras el aumento de pecho nacieron hace muchos años, cuando se comenzó a utilizar el plano submuscular. El concepto de aquel entonces es que el músculo, lo que hacía era mover el implante y de esa forma la prótesis no se contracturaba.

Por tanto, y como consecuencia, si movías el implante, éste se contracturaba menos. Y zás. Ya lo tienes. Masajes a diestro y siniestro. Un detalle importante, a tener en cuenta, es que en aquella época casi todos los implantes mamarios eran lisos.

Pero hoy, casi todos los implantes son rugosos. Y eso significa que están diseñados para reducir la contractura capsular, ya que la dificultan en gran medida. (ahora sabemos que la contractura capsular no tiene nada que ver con el movimiento).

Y si ahora son rugosos y los movemos y provocamos deliberadamente una fricción importante, pues lo que estamos haciendo es que esa fricción cree una doble cápsula (se transforma un implante rugoso en liso, porque entre el cuerpo y el implante aparece una segunda cápsula lisa de fibrina) y aumenta la contractura capsular. Además, éste “manoseo” de los implantes, puede hacer que se forme un seroma o microhematomas, que a la larga provoquen más contractura capsular.

La ciencia nos dice que los masajes provocan más contractura capsular. Por tanto, di no a las clínicas que te los quieren vender. No están mirando por tu provecho, sino por el suyo.