¿Cuándo puedo volver a hacer deporte?
Después de una cirugía, muy especialmente de mama, ésta es la pregunta, que suele ser más común. Muchos preguntan cuando pueden volver a trabajar, otros cuánto estarán ingresados, pero últimamente casi todos me preguntan cuándo pueden hacer deporte. Y además es, muy, pero que muy importante hacer bien las cosas al principio.
Como todos sabemos el deporte es muy bueno en general. Con moderación y respetando ciertos principios en relación a la edad, el peso y el estado de salud se sabe que el deporte hace que vivamos más y mejor.
Una vez dicho ésto , actualmente existe un boom espectacular con respecto al deporte. La gran mayoría de mis pacientes se cuidan mucho y he estado haciendo una revisión de ello y más del 70% de los pacientes sometidos a aumento mamario, van al gimnasio y la mayoría, más de tres veces por semana. Es mucho.
Esto a la hora de programar una cirugía es crucial. El deporte después de una intervención quirúrgica, en el postoperatorio inmediato, es de todo, menos bueno.
El ejercicio hace que nuestra frecuencia cardiaca aumente, también aumenta la tensión arterial y ésto hace que aumente el riesgo de hemorragia. Además el movimiento, por ejemplo, al correr en el pecho puede ser crucial para que los puntos se rompan y se abra la herida.
En el pecho el ejercicio, como el correr o el remo, por poner un ejemplo, hace que los implantes se desplacen de arriba abajo, tanto por el efecto de la gravedad como el efecto del movimiento del músculo pectoral mayor, debajo del cual se coloca normalmente el implante. Ésto puede provocar que el desplazamiento del implante, haga que el bosillo sea mayor, que el que hemos disecado en la cirugía y haga por ejemplo ,que la prótesis se pueda girar a la larga. O que provoque una asímetría en la posición del implante, porque como somos diestros, hacemos más fuerza con el músculo derecho….
Me estoy acordando de un caso muy curioso que viene a apoyar lo que estoy diciendo. Hace ya años, cuando trabajaba en el Hospital General de Alicante, vino de urgencias una paciente de unos 60 años, sometida a una reconstrucción por cáncer de mama, y ese pecho, el operado, era el doble de grande que el no operado. Yo me acordaba del caso, que habíamos operado tres meses antes, por lo que lo primero que le pregunté es si se había dado algún golpe, que hubiera provocado ese hematoma. La paciente lo negó totalmente. Era domingo, y sólo dijo que se había despertado esa mañana con dolor y presión y que lo único que había hecho el día anterior era salir con unas amigas a bailar. Dedujimos, que, aunque hubieran pasado tres meses, la causa del hematoma había sido un aumento de la tensión arterial por el ejercicio provocado por bailar. Increíble que después de tres meses de la cirugía, ya con todo completamente cicatrizado, le hubiera pasado ésto.
Es un caso excepcional, pero si queremos evitar problemas después de una cirugía de mama, nada de deporte durante un mes. Fundamental. Y después despacito y sin forzar durante un mes más.
