09/02/2016

Aumento de pecho. ¿ Anestesia general o local y sedación?

El aumento de pecho, y de hecho toda la cirugía mamaria, es un tratamiento que nos encanta hacer. Cuando viene una paciente a hacerse un aumento de pecho, les explicamos, el tema de las prótesis, las revisiones etc… Y la anestesia. Ay!, la anestesia. Muchas, muchas pacientes tienen miedo a la anestesia.

Y es lógico. Todavía existe en todos nosotros, esa idea de que la anestesia puede ir mal. Hace años, 30-40 años la ciencia anestésica y la cirugía, no habían avanzado tanto y había muchas más complicaciones anestésicas, pero hoy por hoy, la anestesiología es una ciencia que es increíblemente segura. Hay que recordar que se hacen anestesias a bebés de pocos días, a niños y ancianos de 98 años. La anestesiología es espectacular cómo ha avanzado.

El aumento de pecho es una cirugía que se puede hacer con anestesia general y con anestesia local y sedación.

Cuando lo hacemos con anestesia local y sedación, el anestesiólogo lo que hace es sedar a la paciente, hacerla dormir mientras dormimos el pecho con anestésicos que inyectamos a los tejidos. La paciente se “despierta” y nosotros operamos sin que la paciente note nada, ya que todos los tejidos están dormidos. Es como cuando vamos al dentista, que trabaja el diente sin que nos duela. Notamos que nos toca , que nos mueve , pero no notamos dolor alguno. Al cabo de unas horas, el efecto de la anestesia local se va, y volvemos a tener sensibilidad. El problema a ésta técnica es varias desde mi punto de vista. El primero es que , por regla general, el aumento de mamas se hace en pacientes que tienen poco o nada de tejido mamario, por lo que el implante debe ir submuscular. Eso hace que sea difícil dormir bien el músculo, por lo que a la hora de disecar el bolsillo a la paciente le duele. Otro problema , es que hay veces que hay que usar una gran cantidad de anestésico local, que  debido a la cantidad puede llegar a ser  tóxico o sobrepasar el límite tolerado y puede conllevar ciertos problemas. Uno más, es que, a la hora de introducir la anestesia local, ya que lo hacemos con una aguja, podemos pinchar, de manera no advertida, y sin darnos cuenta, el pulmón de la paciente y provocar un neumotórax.

Es raro, pero ya lo he visto más de una vez en varios centros en los que roté durante mi formación. Pero la razón principal por la que no recomiendo hacer ésta técnica, es que la vía aérea de la paciente, es decir, la entrada de aire por la boca hacia los pulmones no está totalmente controlada. Si la paciente respira mal o se marea o se le baja la tensión, el control del aire que respira es fundamental y eso a veces puede no ser fácil de ésta manera.

Nosotros recomendamos en casi todos los casos hacerlo con anestesia general, con una mascarilla laríngea, que reduce algún que otro riesgo tremendamente raro de la intubación oro-traqueal, pero al fín y al cabo con anestesia general. Y nos gusta así,porque la paciente está con mucho más control. El anestesiólogo controla totalmente todos los parámetros, la cantidad de aire que respira, cómo lo hace, a la presión que lo hace. Tiene un control total , de todos los parámetros. Éste control es seguridad.

Si buscas total seguridad en un aumento de pecho, exige que sea con anestesia general. Tendrás una buena experiencia, menos dolor, menos molestias, mejor recuperación y sobre todo la mayor seguridad posible.