Cuál es la mejor edad para hacerse una otoplastia, es una pregunta que nos hacen a todos los cirujanos plásticos, las mamás de los niños muy frecuentemente. Aunque la otoplastia no sea más que 2% de nuestra actividad , lo cierto es que es la única cirugía “estética” que hacemos en niños. Y esto es muy importante por muchas razones.

Las orejas prominentes son algo mucho más serio de lo que muchos creíamos. Hay varios estudios científicos que demuestran , que esos insultos de los niños, tipo “Dumbo”, “orejotas” o lo que los niños se digan en éstos tiempos, tienen un efecto inmediato en la autoestima de los niños y en las notas. Pero lo más increíble de todo , es que en algunos casos, esos efectos destructivos no se curan y se perpetúan en la edad adulta. Serán adultos con problemas de autoestima y de adaptación al mundo laboral, sin contar que eso les ha provocado un bajo rendimiento escolar y por tanto accederán en peores condiciones al mercado laboral al tener menor formación de lo que podrían haber tenido.

Ahora que tengo hijos, me doy cuenta cómo pequeñas decisiones que se toman a edades tempranas tienen un efecto enorme en el futuro. Por eso no hay que tomar a broma que tu hijo no se quiera cortar el pelo para no enseñar las orejas. No hay que tomarse a broma los insultos que le hacen en el colegio. Y eso que he oído de que “tienes las orejas grandes como el papá y el abuelo y que no tienen más importancia”. No lo tendrá para ti, habría que contestar, pero al niño le está afectando.

La mejor edad para operarse las orejas prominentes, las orejas grandes es de cinco a siete años. Se pueden operar cuando se quiera, pero un buen momento es en el verano de pasar a primaria. Y es así, porque es un momento, el verano, donde los amiguitos del colegio no le van a ver , y luego porque es ahí , al comienzo de la primaria donde los insultos se hacen más agudos y más frecuentes.

Pero no es sólo la edad la que determina cuándo. También cómo es el niño. Y es bien sencillo de entender. En primer lugar porque la cirugía lo va a sufrir él y no sólo los padres. El niño tiene que colaborar con el postoperatorio. Tiene que entender la importancia de llevar un vendaje en la cabeza. La importancia de tomarse la medicina para el dolor. La importancia de no darse golpes ni de jugar violentamente al principio. Tiene que tener el nivel de madurez suficiente como para ayudar a los padres en el postoperatorio. Vamos, poner algo de su parte. Y los padres sabemos muy bien si nuestros hijos son lo suficientemente maduros o no.
 

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