Si estás pensando en un aumento de pecho debes saber varias cosas antes de hacerlo que son importantes:
La primera es que hay dos tipos de implantes en cuanto a su construcción. Existen los implantes de silicona y los implantes de suero. Los implantes de silicona dan un resultado más natural y más estable, y los implantes de suero dan más arrugas. Pero también es cierto que los la rotura de los de suero son más fáciles de detectar ya que la mama poco a poco pierde volumen. Además, el suero, que no es más que agua con sal, no puede migrar. Aun así, hoy por hoy los implantes de gel de silicona son mucho mejores, pero si te da reparo lo de la silicona, tienes otra opción más.
La cirugía de aumento de pecho no es para toda la vida. Esto es muy importante. Ni los implantes duran para siempre, ni tu pecho se mantendrá así de bonito para siempre. Es importante decir a nuestros pacientes, que, a lo largo de los diez años tras la primera cirugía, un 25% de los pacientes requieren nueva intervención. Y eso es porque, han tenido hijos, han dado de lactar, o han cogido mucho peso o se ha contracturado el implante, etc. etc.
Tienes que tener buena salud. Y aunque es de sentido común, si tienes alguna enfermedad grave no tiene sentido que hagas ésto. Si estás en tratamiento para alguna patología lo mejor es que se estabilice o termines con tu tratamiento.
Si fumas, es bueno que dejes de fumar cuanto antes, pero si ésto no es posible, fuma lo menos posible tanto antes de la cirugía como dos meses tras la misma.
Ojo con el ejercicio. No te pases con el ejercicio después de la operación. Poco es siempre más. No es recomendable ningún ejercicio intenso con los brazos durante los tres primeros meses.
Tienes que dar tiempo a los tejidos operados a curarse y a cicatrizar bien.
